...But I Swear You're Really Pretty
La Historia
Avelyn es una mujer transgénero que con tan sólo 17 años se va de la casa de sus padres, harta del maltrato del que ha sido víctima los últimos años.
Al no cumplir con las expectativas que había sobre ella, constantemente es víctima de agresiones. También su hermana mayor le ha dado la espalda, por lo que ya no se siente segura.
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Sin ningún lugar a donde ir y sin ningún amigo o familiar en quién confiar, se lanza a la calle, decidida a por lo menos intentarlo. Quiere vivir, pero no así. No quiere seguir ocultando quien es realmente.
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​Mientras llora en la banca de un parque, es encontrada por Elizabeth. Ésta al principio piensa que se trata de un chico. Tras hablar un poco y entender que Avelyn se encuentra quizás tan decepcionada de la vida como ella, le ofrece quedarse en su departamento, ya que ella también está sola.
​Al cabo de unos días, Elizabeth empieza a ver todas las señales, la manera en que su nuevo "amigo" habla de sí mismo, cómo voltea a ver los aparadores de las tiendas de ropa para dama, y el cómo mira a las mujeres, casi como si le doliera algo adentro. Además, hasta ahora no ha conseguido que "él" le diga cuál es su nombre.​
Finalmente Avelyn le cuenta su secreto: desea ser una mujer, y lo ha pedido a los cielos desde que tiene 6 años. Odia todo lo que ha pasado con su cuerpo desde que llegó la pubertad. Luego revela su nombre elegido, y Elizabeth, sin dudarlo, decide apoyarla.
​A lo largo de los siguientes años las dos se irán ayudando mutuamente a lidiar con sus respectivas situaciones. Avelyn se sentirá cada vez más cómoda con el reflejo en el espejo, y podrá ser la persona que siempre quiso ser. Elizabeth la observará cambiar, y sin darse cuenta, será cambiada por ella también. ​​​​​
​Aprenderán a amarse a sí mismas para poder recibir el amor de la otra. ​Ambas encontrarán en la otra un lugar al que pueden pertenecer, donde están seguras y donde pueden ser libres. ​​La confianza, la comunicación y el trabajo en equipo las llevarán a tener una hermosa relación que parecerá más bien un sueño, uno del que no quieren despertar jamás.
​Cuando Elizabeth se sienta abatida por la nostalgia, Avelyn estará ahí para escucharla y consolarla, y ayudarle a mirar de nuevo hacia adelante. ​Y cuando Avelyn tenga un mal día en que la disforia la golpea vuelve a sentir que no es suficiente, Elizabeth se acercará y le dirá al oído:​
"Juro que en verdad eres bonita."
